Una nueva empresa alojada en el Vivero de Empresas del Parque Científico de la Universidad Carlos III de Madrid, GEKO NavSat, trabaja en la integración de la tecnología de navegación por satélite con redes inalámbricas de comunicaciones para el desarrollo de aplicaciones medioambientales, como la monitorización ambiental de incendios y su utilización en rescate en alta montaña.
MetOp-B es uno de los tres satélites meteorológicos operacionales. Imagen: ESA / AOES Medialab.
Los investigadores españoles desarrollan los sistemas de comunicaciones de datos en bandas X y S y la electrónica de los instrumentos de observación óptica de Ingenio.
Investigadores de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) identifican, mediante imágenes nocturnas de Madrid tomadas desde la Estación Espacial Internacional (ISS), los puntos negros de contaminación lumínica de la ciudad. Con la celebración el próximo 31 de marzo de la Hora del Planeta, las autoridades podrían empezar a exigir que se reduzca la excesiva iluminación que no debería observarse desde el espacio.
La reconstrucción de los valores de ozono sobre la península entre 1979 y 2008 arroja que las tendencias comenzaron a ser positivas ocho años después de la aprobación del Protocolo de Montreal. Además, los resultados muestran que España recuperó rápidamente parte del ozono perdido gracias al ozono troposférico, un contaminante secundario derivado de las emisiones industriales.
Investigadores del grupo ISCAR (Ingeniería de Sistemas, Control, Automatización y Robótica) de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) utilizan técnicas basadas en el comportamiento de los seres vivos, como los enjambres, para planear las misiones espaciales interplanetarias. El impulso que recibe un satélite en una misión espacial al pasar cerca de la órbita de algún planeta se puede aprovechar para reducir el coste y la duración de la misión.
Tras el aplazamiento de ayer, los dos primeros satélites Galileo se lanzarán a las 12h30 del día de hoy. Estos satélites, los primeros de los 30 que integrarán la constelación, despegarán a bordo de un cohete Soyuz desde el Puerto Espacial Europeo (Guayana Francesa). Se trata de la apuesta de la Comisión Europea y la Agencia Espacial Europea (ESA) para tener un sistema global de navegación propio e independiente, aunque será compatible con el GPS.
El satélite UARS cayó el sábado 24 de septiembre a las 06h00 (hora peninsular) sobre el océano Pacífico a 14,1 grados latitud sur y 189,8 grados longitud este (170,2 longitud oeste), según informa la NASA en el comunicado final sobre el paradero de la nave. La localización indicada por la agencia espacial estadounidense se sitúa próxima al archipiélago de Samoa, en Oceanía.
La trayectoria del satélite UARS finaliza en un área amplia cerca del archipielago de Samoa, en Oceanía. Imagen: NASA.
Simulación de la colisión de la Luna y la "lunita". Imagen: Martin Jutzi y Erik Asphaug.