El instrumento Raman-LIBS, un espectómetro que viajará en la próxima misión de la Agencia Espacial Europea para explorar posibles restos de vida en Marte (Exomars) en 2013, será capaz de realizar “simultáneamente” un estudio de la composición química elemental y de la estructura de las bases minerales de las muestras que se recojan en el planeta rojo.
Según ha explicado el catedrático del Departamento de Física de la materia condensada, Cristalografía y Mineralogía de la Universidad de Valladolid, Fernando Rull, que coordina el diseño de esta pieza dentro un grupo de investigación del que forman parte representantes de Francia, Reino Unido, Alemania, Holanda y Estados Unidos, “desde el punto de vista científico el diseño ya está perfilado” y ya se han determinado “los componentes esenciales que tiene que llevar para hacer la ciencia que queremos”.
Rull ha precisado que en la última reunión que celebró este grupo de investigadores en Valladolid el mes pasado, se acordó que el Raman-Libs, “analizará las muestras de la superficie mediante un cabezal óptico asociado al brazo robótico que lleve el vehículo pero también las muestras que recoja el perforador a dos metros de profundidad”. No obstante, la particularidad de este instrumento radica en que permitirá realizar “mineralogía y geoquímica, dos ciencias con un solo instrumento”, algo que no sólo nunca se ha hecho en misiones al espacio, sino que “este instrumento combinado no existe ni en los laboratorios, por lo que es un reto extraordinario”.
A través del Raman-LIBS se podrá “intentar detectar si hay inclusiones fluidas, restos orgánicos, o evidencias de la actividad del agua en Marte, que es una de las principales metas que persigue esta misión” ha señalado en investigador a DICYT, que ha precisado que el instrumento permite analizar elementos de muy reducido tamaño “con muy bajas concentraciones”.
Una vez que los científicos ya han fijado el diseño de este aparato, el siguiente paso es que el Consorcio industrial analice las posibilidades de llevarlo a la práctica. Para ello, está previsto que se reúnan en el plazo de tres semanas junto con las agencias espaciales que participan en el proyecto. Tras este encuentro, el diseño se enviará a la Agencia Espacial Europea para su revisión y “si todo va bien comenzará su construcción a finales de 2008 o principios de 2009”, ha afirmado Rull.
El investigador asegura que hasta esa fecha el equipo de científicos tendrá que seguir trabajando para reducir el peso de este instrumento. “Ahora mismo pesa por encima de 3 kilos y hay que ir reduciendo la masa de los distintos componentes hasta alcanzar un kilo y medio”, ha precisado.
Rull ha participado hoy en el Encuentro sobre fronteras de la Ciencia. Tiempo de Física que se ha celebrado en el aula magna de la Facultad de Ciencias de Valladolid. Durante su intervención el catedrático ha querido enfatizar “la importancia de combinar la ciencia con la tecnología” en la exploración en Marte y para ello ha mostrado a los asistentes cómo funciona un sistema Raman remoto analizando minerales a 8 o 10 metros de distancia.