¿Puede medirse la creatividad científica?

Las citas a trabajos previos, que los científicos hacen en sus artículos, reflejan la creación y la transmisión de conocimiento, y pueden usarse para asignar creatividad a sus autores, según un estudio reciente realizado en el Departamento de Física de la Materia Condensada de la Universidad Autónoma de Madrid.

¿Puede medirse la creatividad científica?
Tabla: Algunos de los científicos más creativos y sus índices de creatividad

¿Qué es la creatividad científica? Al igual que la creatividad artística o literaria, parece ser un concepto demasiado subjetivo para poder definirlo con precisión, y menos aún medirlo. La ciencia pura no se traduce inmediatamente en aplicaciones prácticas cuyo valor económico pueda cuantificarse. Sus resultados sólo se publican en artículos científicos, para que otros especialistas puedan leerlos y utilizarlos en sus propias investigaciones. Se crea así colectivamente un conocimiento científico básico, que en el futuro se convertirá en tecnología.

Según un trabajo publicado en el Journal of Informetrics (Journal of Informetrics, 1: 123–130, 2007) por José M. Soler, investigador y profesor de Física en la Universidad Autónoma de Madrid, ese proceso de creación y transmisión de conocimiento queda reflejado en las citas que los científicos hacen en sus artículos. Esas citas son el reconocimiento de que sus resultados se basan parcialmente en trabajos previos y, por tanto, de que ha habido una transmisión de conocimiento creado previamente por los autores citados. Así, un tratamiento estadístico y matemático apropiado permite asignar una creación de cierto grado de conocimiento a los autores de cada artículo, dependiendo de las citas que hace y de las que recibe. En cierto modo, es como si las citas fueran transacciones económicas, en las que unos autores 'compran' conocimiento a otros autores de trabajos previos, para así crear sus propios trabajos, que serán 'comprados' (citados) en el futuro.

Esta metodología no deja de tener sus puntos débiles y criticables, ya que en cierto modo DEFINE la creatividad como algo objetivo, que puede no coincidir con nuestra apreciación subjetiva. Pero, al fin y al cabo, algo hoy tan aceptado como la temperatura objetiva fue también una percepción puramente subjetiva, hasta que la invención del termómetro y el desarrollo de la termodinámica y de la mecánica estadística permitieron definir una temperatura física objetiva.

Fuente: Universidad Autónoma de Madrid
Derechos: Creative Commons
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