Siempre que se dirige a una audiencia, como los mil físicos de altas energías que le escucharon la semana pasada en Valencia, Alan Guth (Nueva Jersey, 1947) insiste en la idea que le inspiró y que, según las quinielas, podría llevarle a ganar un premio Nobel: “La teoría del Big Bang está muy bien para explicar cómo empezó todo, pero no dice nada sobre el bang”. Su teoría de la inflación cósmica, que en pocas semanas podría verse confirmada, explica ese bang y predice la existencia de infinitos universos.