Nuevas observaciones de la constelación de Orión han revelado la presencia de ondulaciones en la superficie de su nube molecular. Los resultados del estudio, realizado por investigadores del Centro de Astrobiología (CSIC-INTA), sugieren que el origen de estas ondas, similares a las de la superficie del mar, se halla en los vientos estelares producidos por las estrellas masivas jóvenes de Orión. El trabajo aparece publicado en el último número de Nature. Las imágenes fueron obtenidas por el radiotelescopio de 30 metros de diámetro del
Instituto de Radioastronomía Milimétrica en Sierra Nevada, en Granada, que registró emisiones de monóxido de carbono.
Las estrellas masivas jóvenes emiten una intensa radiación que interactúa con la nube de gas y polvo en la que se han formado. Aunque los científicos sospechaban desde hace tiempo que el enorme flujo de fotones ultravioletas generado por estas estrellas tenía un gran impacto sobre la evolución química de la nube de gas, hasta ahora no existían evidencias precisas de la presencia de ningún tipo de onda causada por los vientos estelares.