Investigadores del Departamento de Ingeniería Química de la Universidad de Oviedo han desarrollado un sistema que permite estandarizar la producción de humo para el proceso de curado. Además de controlar el proceso de ahumado, la humedad y la temperatura, el sistema reduce al máximo los niveles de benzopirenos, sustancias poco saludables que el humo traspasa a los embutidos.
En la imagen, uno de los braseros de un secadero de embutidos como los que se utilizan en la actualidad. Foto: J. S. M.