Un equipo internacional de astrónomos, liderado por astrofísicos del Centro de Estudios Espaciales de Rayonnements (Francia), ha descubierto un nuevo tipo de agujero negro, con una masa intermedia de más de 500 veces la masa del Sol, según publica esta semana la revista Nature. Hasta ahora se habían encontrado agujeros negros supermasivos (con varios millones de masas solares) o del tamaño de una estrella (de entre 3 y 20 masas solares).
Los científicos han encontrado en el borde de la galaxia ESO 243-49 (situada a unos 290 millones de años-luz de la Tierra) una nueva fuente, denominada HLX-1, cuya radiación solo se explica si contiene un agujero negro de masa intermedia. Las observaciones se han realizado con el telescopio espacial XMM-Newston de la ESA.