El rover Curiosity se ha desplazado unos 21 metros desde el punto de aterrizaje, completando su cuarta caminata y continuando su viaje hacia el este. Su próximo hito es Glenelg, donde comenzará a usar su taladro. Los técnicos de la NASA esperan que este viaje lleve varias semanas, ya que incluye un par de paradas en las que se llevarán a cabo actividades de revisión de su brazo robótico. La ubicación de Glenelg fue escogida porque es lugar propicio para encontrar materiales rocosos ideales para ser analizados. La NASA ha informado de que el rover goza de buena salud.