Un grupo de científicos del Instituto Australiano de Ciencias del Mar ha descubierto que en las reservas marinas donde la pesca está prohibida no sólo sirven para proteger a las especies de peces, sino que también tienen otros beneficios. Así, han observado cómo los estallidos de Acanthaster planci (en la imagen), una especie de estrella de mar especialmente dañina para los arrecifes de coral, se producen con menos frecuencia en las áreas protegidas.