La astronauta Sally Ride, la primera mujer estadounidense que viajó al espacio, murió ayer a los 61 años en su casa de La Jolla (California) a causa de un cáncer, casi tres décadas después de su primer viaje espacial y tras años dedicados a la investigación y a la divulgación científica. Su primera misión en el espacio duró 147 horas, sirvió para realizar una decena de trabajos en satélites y otros aparatos, pero pasaría a la historia por ser el primer viaje fuera del planeta de una mujer de Estados Unidos, que luchaba entonces por consolidarse como la mayor potencia aeroespacial del mundo.