El buque japonés de perforación Chikyu ha logrado extraer muestras a una profundidad mayor de 2.111 metros por debajo del fondo marino –el anterior record –, en el noroeste del océano Pacífico, cerca de la península de Shimokita (Japón). Esta marca supone un nuevo récord de profundidad, y se ha conseguido durante la Expedición 337, en el marco del Programa Integrado de Perforación Oceánica (IODP, por sus siglas en inglés).
El objetivo principal de la expedición es perforar hasta los 2.200 metros de profundidad y obtener muestras de las formaciones de carbón enterradas. La investigación proporcionará una nueva visión de la vida en las profundidades asociada a un sistema hidrocarbonado. El científico Guy Harrington, de la Universidad de Birmingham (Reino Unido), que trabaja a bordo del buque desde julio de este año, ha asegurado que esta expedición “abre una ventana fascinante a los bosques de fósiles ahora enterrados a dos kilómetros bajo la roca”.