Un estudio demuestra por primera vez la posibilidad de volver a caminar –sin depender de extremidades robóticas controladas manualmente– tras una paraplejia ocasionada por una lesión de la médula espinal. El hallazgo se ha probado en un hombre de 26 años que llevaba cinco años en una silla de ruedas, aunque todavía serían necesarios más análisis para poder extrapolar estos resultados al resto de personas con esta discapacidad.