Investigadores de la spin off de la Universidad de Granada NanoMyp están desarrollando un tejido inteligente destinado a admininistrar fármacos de forma controlada al responder a estímulos externos como la temperatura o el PH de la piel. Este tipo de tejidos sería muy útil para enfermos crónicos que dejarían de estar pendientes de un reloj y reduciría costes de tratamiento al ser administrados directamente en sangre. ¿Quién sabe si en el futuro vestiremos una camiseta para curar el dolor de espalda o nos recetarán un pantalón para aliviar un golpe en la rodilla?