Investigadores de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria han analizado más de 60 marcas de queso habituales en los supermercados. La concentración de contaminantes organoclorados en la mayoría de las muestras es inferior a lo que marca la legislación europea, pero en unas pocas está por encima. Los científicos recomiendan vigilar los bifenilos policlorados, por ser cancerígenos. Las mayores concentraciones de estos compuestos han aparecido en quesos orgánicos.