Los fósiles vegetales hallados en el barranco de Las Angustias, en La Palma, podrían tener más de 200.000 años de antigüedad y ofrecen una instantánea de un ecosistema completo, según las primeros estudios realizados por su descubridor, el paleobotánico Alan Channing "Los fósiles vegetales de La Palma son únicos", aseguró ayer el investigador en el acto de presentación en el Museo Arqueológico Benahorita, en Los Llanos de Aridane, de las rocas de sedimento en los que se encuentran atrapadas un número sin determinar de hojas, "principalmente perteneciente a vegetación de laurisilva".