Científicos de la Universidad de Jaén han creado una herramienta matemática que determina si un bosque podrá recuperarse por sí solo o si requerirá de medidas de apoyo. Este instrumento permite reducir a la mitad el tiempo necesario para la regeneración de la vegetación ya que, teniendo en cuenta los factores que le afectan, es capaz de predecir su desarrollo con una antelación de entre cien y doscientos años. El empleo de esta herramienta permite que los trabajos de recuperación tras un incendio sean más eficientes.