Cerca de 800 técnicos trabajan para que el gran acelerador de partículas del CERN busque nueva física a partir de 2015. Después del gran anuncio del descubrimiento del bosón de Higgs, los científicos reconocen que en realidad se lo esperaban y que no acaban de dar con la clave para avanzar en las grandes cuestiones sobre el universo. Confían en que surja un nuevo ‘Einstein’ que traiga nuevas ideas.