Investigadores de la Universidad de Texas (EE UU) y otras instituciones internacionales han ideado un método para crear músculos artificiales retorciendo y enrollando hilo de pescar y de coser. Estos músculos de polímero son más potentes que los de los humanos y podrán aplicarse en el desarrollo de prótesis artificiales, robots humanoides y exoesqueletos, según sus creadores.