En la actualidad, las poblaciones naturales de la anguila se encuentran en una situación crítica. Su número ha disminuido de forma significativa y se ha llegado a una situación que incluso hace dudar de su supervivencia. De hecho, la anguila ha sido incluida recientemente en la lista de especies amenazadas del CITES (Convention on International Trade in Endangered Species of Wild Fauna and Flora), lo que ha llevado a la Comisión Europea a adoptar medidas para la protección y recuperación de la especie, que dan prioridad a su reproducción en cautividad.