Un estudio, liderado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, ha descubierto una alta incidencia de anomalías congénitas en vértebras cervicales halladas en la cueva de El Sidrón (Asturias). Según los investigadores, estos defectos serían el resultado de los altos niveles de emparejamiento entre los miembros de los grupos neandertales.