Un equipo de científicos españoles, en el que participa la Universidad de Granada, ha detectado de forma muy precisa una estructura en la parte más interna de un cuásar situado a unos 5.000 millones de años luz de la Tierra. Estos objetos lejanos son muy pequeños, pero emiten grandes cantidades de energía, en este caso debido a un disco de materia caliente que orbita a gran velocidad alrededor de un agujero negro supermasivo.
Representación artística de un cuásar con un agujero negro supermasivo durante el Universo temprano. / Zhaoyu Li (Observatorio Astronómico de Shanghai)
Un equipo internacional de astrónomos, liderado por Montserrat Villar, del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC), ha empleado dos de los mayores y más avanzados telescopios del mundo, el Gran Telescopio Canarias y el Very Large Telescope, para estudiar el cuásar SDSS J0123+00, uno de los pocos cuásares de tipo 2 estudiados en profundidad hasta la fecha. La investigación, que constituye uno de los primeros resultados científicos del Gran Telescopio Canarias, ha desvelado diversas evidencias de interacción entre el cuásar y una galaxia cercana, que puede haber encendido la actividad del cuásar.
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