Tres satélites espaciales han monitorizado las variaciones del terreno de la comarca de Vega en Granada desde el año 2003, así como la explotación del acuífero en esa zona. Los resultados del estudio de la Universidad de Granada y el Instituto Geológico y Minero de España demuestran que el suelo se hunde hasta un centímetro al año durante los periodos secos. Según los científicos, los datos obtenidos no implican riesgo por el momento.