Un proyecto de investigación de la Universidad de Zaragoza analizará Ibercivis, como una red social donde miles de personas colaboran con la ciencia. El Instituto de Biocomputación y Física de Sistemas Complejos (BIFI) invita a los usuarios a participar en este experimento social pionero en el mundo, así como a optar a los numerosos premios previstos en un concurso organizado en reconocimiento a su altruismo.
Ibercivis, la mayor plataforma ciudadana que presta la capacidad de sus ordenadores a experimentos científicos, pasa a investigarse a sí mismo. Y es que hoy en día, las redes sociales se han convertido en objeto de intenso estudio, dada su relevancia a la hora de describir fenómenos tan cotidianos y a veces tan importantes como la propagación de rumores o de enfermedades, el marketing en la Red, el tráfico de información en internet o el colapso en las redes de aeropuertos internacionales.
Este estudio sobre Ibercivis será coordinado por Yamir Moreno, miembro del grupo de investigación Física, estadística y No lineal, del BIFI, y uno de los referentes mundiales en el estudio de redes sociales sobre cómo se organizan, cómo se propaga en ellas la información o cómo evolucionan en el tiempo. Para eta investigación se ha puesto en marcha una aplicación científica, llamada IberNet, que no ejecutará ninguna aplicación en el ordenador del usuario. Al contrario, será la actividad del participante precisamente la que constituirá el experimento científico.
De hecho, IberNet tiene como objetivo estudiar el comportamiento de los usuarios actuales de Ibercivis y de todos aquellos que sean invitados. Estas interacciones se modelan como una red en la cual se establecen relaciones y se transmite información, evolucionando en el tiempo.
Este proceso es de un valor inmenso para los científicos, pues estudiando este sistema pueden llegar a comprender muchos fenómenos que ocurren en la sociedad y en la Naturaleza, como por ejemplo la propagación de enfermedades o cuáles son las
interdependencias entre todas las partes de una célula del cuerpo humano. Además, estos experimentos científicos son difíciles de realizar pues no es simple encontrar comunidades humanas de miles de personas dispuestas a participar en los mismos.
Para Yamir Moreno, poder estudiar una red tan numerosa y con usuarios tan diversos supone "una oportunidad única" para quienes como él estudian las redes complejas. Este tipo de estudios tiene luego validez para otras ramas de la ciencia como sociología o propagación de pandemias, entre otros.
El estudio científico analizará la Red Social que se vaya configurando. En concreto, el experimento consiste en que cada persona registrada en Ibercivis podrá invitar a cuantas personas desee para que participen en el experimento sean ya miembros de Ibercivis o no. Una vez registrados, los nuevos usuarios podrán también invitar a quién lo deseen. Las personas que acepten su invitación y se registren en Ibercivis, serán hijas de la anterior. Se irá conformando así un gran número de árboles genealógicos.
Un gran ordenador virtual
Desde su creación en junio de 2008, Ibercivis ha conseguido conectar a más de 18.000 usuarios de los cuales unos 2.000 se conectan diariamente. Esto forma un ordenador virtual de unos 8.000 cores que se usan para ejecutar 9 aplicaciones científicas de varias ramas de la ciencia: fusión, materiales, proteínas, neurociencias, sanidad o física cuántica. En este proyecto participan investigadores de España, Portugal y varios países de Latinoamérica. “Ibercivis está creciendo continuamente y estamos orgullosos por ello. Ya no es solo un recurso más de computación sino que también es una red social que vive en Internet”, apunta Alfonso Tarancón, director de Ibercivis.
Además, en reconocimiento al esfuerzo y a la participación, Ibercivis pone en marcha un nuevo concurso con importantes premios (9 Netbooks, 5 Cámaras, 3 Wiis, 2 PS3, entradas para conciertos...) que se concederán a los que logren más amigos en esta Red de Ibercivis. El concurso ha comenzado el día 10 de Junio y finalizará el 20 de Septiembre.
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