Entre hoy y mañana se celebra en Barcelona GENNESYS, el primer Congreso Internacional de Nanotecnología e Infraestructuras de Investigación. Más de 300 científicos, políticos y empresarios de 20 países participan en esta cita con el mundo nano, que lideran Alemania, EE UU, Japón y España.
El Secretario de Estado de Investigación, Felipe Pétriz, el Presidente del CSIC, Rafael Rodrigo, el Director General de Investigación de la Generalitat, Joan Roca, y la Rectora de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), Ana Ripoll, han inaugurado hoy en Barcelona el primer Congreso Internacional de Nanotecnología e Infraestructuras de Investigación, GENNESYS.
En el encuentro, que finaliza mañana, participan más de 300 autoridades científicas, políticas y personalidades del mundo empresarial, procedentes de 20 países. Está organizado por el Parc de Recerca UAB, el Institut de Ciència de Materials de Barcelona (ICMAB del CSIC), el International Iberian Nanotechnology Laboratory (INL) y el Sincrotrón alemán de electrones DESY.
El objetivo de la reunión es establecer una colaboración estratégica entre los laboratorios de investigación en nanomateriales, las universidades, la industria y las infraestructuras europeas de investigación.
Durante el primer día los expertos han coincidido en que la nanotecnología “es clave para que Europa mejore su competitividad”, y que los retos sólo se solventaran si se crea una plataforma europea de cooperación que una todos los sectores implicados, públicos y privados.
Los retos nanotecnológicos
El presidente de GENNESYS y Director General de DESY, Helmut Dosch, ha destacado la necesidad de crear “nuevos sistemas energéticos que satisfagan nuestras necesidades y que sean más sanos, encontrar nuevas vacunas, crear transportes más ecológicos y dar respuesta a una demanda creciente en materia de TIC”.
Dosch ha animado al sector público a que informe a la sociedad sobre los riesgos de la nanotecnología y así evitar que se formen ideas equivocadas y temores que pueden afectar al desarrollo y aplicación de esta ciencia.
Los ponentes también han planteado la necesidad de que los investigadores tengan una mayor accesibilidad a las infraestructuras de investigación “y que la educación de las nuevas generaciones sea interdisciplinaria, puesto que la nanotecnología es un campo transversal”.
“En Nanotecnología, la velocidad del cambio es tal que se hace necesario encontrar una fórmula verdaderamente flexible que nos permita salvar la burocracia de nuestros sistemas actuales si queremos aprovechar todo el potencial de que disponemos”, ha subrayado Ramón Pascual, presidente de la Comisión Ejecutiva del Sincrotrón Alba.
España bien posicionada
En los últimos años España se ha convertido en uno de los países que lidera la investigación en Nanotecnología, en parte gracias al desarrollo de 26 infraestructuras científico técnicas singulares (ICTS), como el Sincrotrón Alba.
“No es casualidad que el primer congreso internacional en Nanotecnología se celebre en Barcelona”, apunta Jordi Marquet, director general del Parc de Recerca de la UAB, que explica: “Hace 30 años prácticamente no había investigación en España, pero en poco tiempo, nos hemos puesto al nivel de países como Alemania o Reino Unido, que nos llevaban siglos de ventaja”.
De hecho, este campo constituye una línea estratégica del Plan Nacional de Investigación, que lleva ya 2 años funcionando en España y que la sitúa como uno de los pioneros mundiales junto a potencias como EE UU, Japón o Alemania.
Los expertos calculan que la nanotecnología generará un negocio de entre uno y tres billones de dólares en diez años. Aunque se encuentra en las fases iniciales de estos desarrollos, en la actualidad se calcula que los productos nanotecnológicos mueven un mercado de unos 200.000 millones de dólares en todo el mundo.