Un estudio de la Universidad de Sevilla revela un mecanismo básico de inundación en las lagunas de Doñana hasta ahora desconocido, que se debe a flujos de aguas por debajo de la superficie del terreno. Conocer estos sistemas de funcionamiento permite tomar medidas de gestión y conservación específicas para cada modelo.
Investigadores de la Universidad de Sevilla (US) han identificado tres mecanismos básicos de inundación en las lagunas de Doñana. Por un lado, el hipogénico, que se da cuando el agua del acuífero inunda la cubeta lagunar. El epigénico, cuando el humedal se inunda a partir de flujos superficiales como la descarga aluvial. Un tercer modelo intermedio, hasta este momento no identificado, es el subsuperficial o mesogénico, asociado a flujos de aguas ubicados inmediatamente por debajo de la superficie topográfica.
Conocer, el funcionamiento de las lagunas que integran el Complejo Palustre de Doñana (Huelva) permitirá tomar medidas de gestión y conservación específicas para cada modelo, una cuestión fundamental ante el cambio climático.
“La presencia de cuerpos de agua en superficie durante gran parte del año en determinadas lagunas en el entorno de las cuales los niveles piezométricos se encontraban muy por debajo de la superficie topográfica, así como la ausencia prolongada de precipitaciones durante ese período, requería una explicación a la permanencia de dicha agua en las cubetas lagunares”, comenta el autor de este trabajo, César Borja Barrera, del departamento de Geografía Física y Análisis Geográfico Regional de la US.
Análisis durante más de 10 años
A partir de esta constatación, se planteó un monitoreo detallado de variables hidrogeomorfológicas con un seguimiento quincenal, que en algunos casos se ha continuado durante más de 10 años, y que ha proporcionado la información de base para identificar este nuevo modelo de tipo mesogénico.
En esta investigación se ha puesto de manifiesto la enorme diversidad que exhibe el sistema palustre en Doñana. Existe, un gradiente temporal a través del cual se activan o inhiben los diferentes mecanismos de alimentación hídrica en el humedal, al tiempo que se reconoce un patrón en la distribución espacial de los diferentes modelos condicionado por las características morfotopográficas y fisiográficas del Manto Eólico Litoral de El Aabalario-Doñana (MELAD).
Evolución geomorfológica
“Los modelos de funcionamiento identificados en esta investigación constituyen una magnífica herramienta para la gestión. Saber como han funcionado los humedales asociados a cada uno de los tipos de modelos durante los últimos años proporciona al gestor un conocimiento acerca de escenarios de futuro diferenciados”, destaca este investigador de la Universidad de Sevilla.
En la actualidad la inmensa mayoría de los estudios que se desarrollan sobre el complejo Palustre de Doñana responden a cuestiones biológicas o ecológicas y no a su evolución hidrogeomorfológica. El origen de dicho complejo está ligado a la existencia de un manto eólico litoral con dunas que dan acomodo a las lagunas y que es el resultado de la acumulación de arenas durante al menos los últimos 5.000 años.
Referencia bibliográfica:
Proyecto “Dinámica y conectividad hidro-bio-geomorfológica de las lagunas de Doñana: modelos de funcionalidad y evolución por transectos a escala de detalle mediante un Sig (Sigrald) para una gestión adaptada a la variabilidad climática” (OAPN 036/2008), financiado por el Organismo Autónomo de Parques Nacionales del anterior Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (Actual Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente).