Desde 1998 el Programa de Atención Integral al Médico Enfermo ha atendido a más de 3.000 profesionales con problemas psicológicos y de adicción, en especial de alcoholismo. Los médicos de familia son los más afectados por estos trastornos, y también se ha visto como los médicos jóvenes aumentan su presencia en el programa.
A lo largo de los más de 14 años que lleva implantado el Programa de Atención Integral al Médico Enfermo (PAIME), 3.099 médicos han sido atendidos y de ellos un porcentaje cercano al 90% se ha recuperado e incorporado al ejercicio de la medicina.
Estos son los resultados de un programa pionero en Europa que fue creado en 1998 por el Colegio de Médicos de Barcelona para atender a los facultativos con problemas psíquicos o conductas adictivas. En los dos últimos años (2011-2012), se destinaron al PAIME 1.877.860 euros.
“Uno de nuestros objetivos es saber si la crisis ha repercutido en la salud de los profesionales, al tener que trabajar más horas con menos medios”, ha señalado hoy en rueda de prensa Juan José Rodríguez, presidente del Consejo General de Colegios de Médicos de España (CGCOM).
“Sin un programa como este algunos de nuestros compañeros tendrían riesgo de mala praxis”, ha explicado Serafín Romero, secretario general del CGCOM. “La adicción es una enfermedad durísima y difícil de tratar, y es peor si el enfermo es un médico”.
Los mayores porcentajes en los motivos de demanda son los trastornos mentales (67%). Le siguen, el alcoholismo (16%), la patología dual (10%) y las drogas (7%).
Es de destacar que los Médicos en Formación (MIR) empiezan a ser un número importante en el programa PAIME (9%). “El número de médicos menores de 30 años colegiados es menor, por lo que en proporción los jóvenes son los más atendidos por el PAIME”, señala Romero.
Los médicos de familia son los más afectados (40%). “Pueden tener una mayor predisposición debido a que muchos eligen esa especialidad aunque no les guste, porque no quedan otras plazas”, aclara Romero.
El PAIME nació para ayudar a médicos con este tipo de trastornos, que pueden llegar a sufrir uno de cada diez profesionales a lo largo de su vida laboral, y que pueden afrontarse con un tratamiento eficaz. La mayoría de los colegios de médicos de España han implantado este programa.