Nuevas salidas de emergencia adaptadas a las personas con movilidad reducida

Investigadores del proyecto SALEME, en el que participa Tecnalia y las empresas Demesel, Tesa y el Instituto Gerontólogico Matía Ingema, han desarrollado una innovadora puerta para salidas de emergencia que es adecuada para personas con diversidad funcional. Se puede instalar en hospitales, centros públicos y pabellones.

Puerta
La nueva puerta de emergencia. Imagen: Tecnalia.

Las puertas para salida de emergencia son de fácil apertura, para favorecer la evacuación de un edificio. El problema está en que estas puertas se utilizan en situaciones límite, como un incendio o casos de emergencia. En estos casos el simple accionamiento de la barra para la apertura de la puerta puede ser una acción difícil de ejecutar por diversas razones como la capacidad funcional, el estado de desvanecimiento del usuario o la falta de visibilidad.

Ahora, los integrantes del proyecto SALEME (Tecnalia y las empresas Demesel, Tesa y el Instituto Gerontólogico Matía Ingema) han desarrollado una innovadora puerta para salidas de emergencia que es adecuada a personas con diversidad funcional. Se ha desarrollado una puerta de fácil y rápida apertura adecuada para su instalación en hospitales, centros públicos, pabellones industriales y otras instalaciones.

Como resultado del proyecto se ha desarrollado una puerta metálica con prestaciones frente al fuego y apta para la evacuación. Aparentemente, esta puerta no se diferencia de las actuales; su valor añadido está en su apertura mediante accionamiento por presión sobre los paneles superior e inferior, en los cuales se han integrado unos sensores que accionan el dispositivo antipánico. Cuando la puerta detecta una ligera presión sobre cualquiera de estos paneles, el mecanismo de apertura se activa de forma automática, lo cual resulta de gran utilidad en la evacuación de locales con gran presencia de personas de movilidad reducida.

No en vano, la validación del producto final fue realizada por este mismo colectivo de personas, usuarios con movilidad reducida en la planta baja del Hospital Bermingham de la Fundación Matia, en San Sebastian. Entre los usuarios que probaron el producto se encontraban personas mayores que viven de forma autónoma en su domicilio, personas que acuden al centro de día del hospital y personas con deficiencia funcional motora del centro IZA de Fundación Matia que utilizan silla de ruedas para desplazarse. El 63,5% de los usuarios que probaron el funcionamiento de la puerta afirmaron que la puerta es de apertura fácil y el 6,5% muy fácil.

Atendiendo a criterios de clasificación de una puerta cortafuegos (según la norma EN 13501-2:2007+A1:2009) la puerta desarrollada en el proyecto SALEME ha conseguido unas prestaciones de EI 90, es decir, durante al menos 90 minutos, la puerta ha mantenido las prestaciones de aislamiento e integridad, sin haberse producido ningún tipo de fallo.

Este producto innovador va más allá de las exigencias de la legislación vigente en materia de seguridad en la evacuación y frente al fuego y trata de cubrir necesidades sociales y de seguridad para las que no existe una adecuada respuesta.

Fuente: Tecnalia
Derechos: Creative Commons
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