Expertos de la Universidad Politécnica de Cataluña han desarrollado un sistema pionero de monitorización y actuación portátil para identificar en tiempo real el estado motor de las personas con párkinson. El sistema permitirá dosificar automáticamente la medicación de los pacientes en función de su estado y mejorar su calidad de vida.
Monitorizar en tiempo real la actividad motora de las personas con párkinson. Ese ha sido el reto del proyecto europeo Rempark (Personal Health Device for the Remote and Autonomous Management of Parkinson’s Disease) de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC).
El sistema desarrollado permitirá evaluar en qué fase se encuentra el paciente mientras anda o durante sus actividades diarias, y actuar cuando la persona sufre un episodio de bloqueo de la marcha.
El objetivo general de Rempark es cuantificar con alta fiabilidad las situaciones que más incapacitan al paciente en su vida cotidiana y actuar, siempre con supervisión médica, de la forma menos invasiva y efectiva.
Rempark consta de dos elementos: un brazalete que incorpora un sensor para medir el temblor del paciente, y un sistema inercial que va ligado a la cintura mediante un cinturón de material biocompatible, del tamaño de un teléfono móvil, equipado con un conjunto de sensores inalámbricos con capacidad de procesamiento y transmisión de la información medida y tratada.
Este sistema es capaz de detectar los parámetros sintomatológicos de la enfermedad y determinar la fase en la que se encuentra el paciente en cada momento (fenómenos ‘on-off’ – fluctuaciones del estado del enfermo durante el día-, bloqueo u otros trastornos de la enfermedad).
Por primera vez en Europa se trabajará exclusivamente con datos ambulatorios sobre la enfermedad, es decir, que el sistema se ensayará en un centenar de pacientes desde su casa y no en el laboratorio, para lo que se están reclutando voluntarios en España, Italia, Irlanda e Israel.
Estimuladores sensoriales
El equipo Rempark consta de estimuladores sensoriales auditivos, visuales o hápticos (relacionados con el tacto); de una bomba de inyección subcutánea de medicación regulable y de un sistema de estimulación eléctrica (FES). Según las características del paciente se utilizará uno u otro estimulador, o una combinación de ellos.
El equipamiento personal se completa con un teléfono móvil que tiene varias funciones: conecta los sistemas de monitorización y de actuación; es una interfaz para la supervisión médica y, a la vez, hace de enlace con el servidor de datos.
En un segundo nivel, el sistema constará de un servidor central donde se almacenarán, procesarán y analizarán todos los datos de los pacientes para determinar su evolución. Actuará también como sistema inteligente de apoyo a la toma de decisiones por parte el equipo médico supervisor.
El proyecto, que se acabará el 2015, comportará beneficios tanto médicos como sociales y económicos: permitirá reducir el número de hospitalizaciones y mejorará la gestión de la enfermedad, el tratamiento y la rehabilitación de los pacientes.
Según los investigadores, todo ello contribuirá a mejorar el sistema sanitario europeo, a proporcionar una atención de mayor calidad y más personalizada a los pacientes de párkinson, y a hacer un uso más sostenible de los recursos públicos.
Además de la UPC, en el proyecto participan el Centro Médico Teknon, Telefónica I+D y la Asociación Europea de la enfermedad de Parkinson, así como varios centros de investigación y empresas de Alemania, Portugal, Italia, Israel, Irlanda, Suecia y Bélgica.