Un grupo de investigación del Hospital Universitario de Salamanca trata de analizar las alteraciones genéticas que presenta el cáncer de páncreas para avanzar en la lucha contra uno de los tumores más agresivos y de peor pronóstico que existen. Este cáncer suele detectarse en fases muy avanzadas, así que el objetivo de los estudios es encontrar marcadores que puedan servir de pista tanto para anticipar el diagnóstico como para ofrecer un pronóstico más preciso de la enfermedad.
"Aun siendo de pequeño tamaño, el cáncer de páncreas es un tumor que produce afectación regional y afectación a distancia que impide que sea tratable, no responde al tratamiento oncológico tradicional de quimioterapia y de cada 10 pacientes que se diagnostican, sólo tres son subsidiarios de un tratamiento quirúrgico, que es la única terapia potencialmente curativa", afirma Luis Muñoz Bellvís, jefe de sección de Cirugía Hepática, Biliar y Pancreática del Hospital Universitario.
Este centro es referencia regional para tratar este tipo de cáncer, de manera que, a pesar de su baja prevalencia, al año se llevan a cabo unas 50 operaciones. Esto permite que los investigadores puedan estudiar estos tumores e intentar averiguar por qué es tan agresivo este tipo de tumor. El caso más conocido de una persona con cáncer de páncreas es el de Steve Jobs, presidente de la compañía tecnológica Apple, pero sólo el 20% de los casos se pueden operar y, de ellos, sólo sobrevive el 25% de los pacientes tras cinco años.
La especialista Laura Gutiérrez explica que "una de las metas ideales es encontrar un marcador que detecte de forma temprana la existencia del tumor de páncreas, porque los pacientes cuando son diagnosticados se encuentran en fases muy avanzadas", asegura, siendo esta una de las razones por las que es tan agresivo. Cuando aparecen los síntomas, entre el 80 y el 90% de los casos ya son inoperables, por eso, los investigadores se preguntan si hay algún marcador genético que tenga alguna expresión en forma de proteínas que se puedan identificar y saber de manera anticipada que un paciente puede desarrollar un cáncer de páncreas.
Mapear todo el ADN del paciente
Para lograrlo, este grupo de investigación se ha propuesto analizar los genes que puedan estar relacionados con el tumor, de manera que en los últimos años 36 pacientes han sido caracterizados desde el punto de vista genético. Un primer estudio, se centró en 48 regiones cromosómicas y ha sido objeto ya de una publicación en la revista científica Histopathology. Sin embargo, ya está listo un segundo artículo que recoge los resultados de otro estudio con técnicas de mayor resolución que han permitido analizar todo el genoma de los pacientes, es decir "mapear todo su ADN" en busca de alteraciones genéticas que ofrezcan pistas a los científicos.
Posteriormente, los investigadores correlacionarán todos estos estudios genéticos con las características de la enfermedad. Así sabrán si una buena o mala evolución de los pacientes se puede asociar a determinadas características genéticas. "A pesar que el cáncer de páncreas es uno de los que tiene un peor pronóstico, la idea de la investigación es obtener marcadores genéticos que puedan influir en el pronóstico de estos pacientes", señala José María Sayagués, otro de los investigadores del grupo. Esto permitiría saber cuál puede ser la supervivencia de un enfermo y tomar decisiones acerca de la pertinencia de operarlo o someterlo o no a un determinado tratamiento, como la quimioterapia.
Hasta el momento, "nos estamos encontrando tantas alteraciones cromosómicas que no sabemos cuál es la primera, la que da lugar al resto", reconocen los científicos. En páncreas hay múltiples clones, es decir, múltiples líneas de mutación de esas células y cada una asociada a determinados cambios genéticos. Además, este tumor se detecta ya tan avanzado que los cambios son múltiples y el hecho de que el número de casos que se registran sea relativamente pequeño en comparación con otros tipos de cáncer tampoco facilita las cosas.
Estudio europeo
Por eso, el Hospital Universitario participa en un gran proyecto europeo denominado European Study on Chronic Pancreas Diseases and Genetics (PanGen-EU Study), sobre epidemiología de páncreas que tiene como objetivo inicial ver si hay características relacionadas con el tipo de vida que puedan influir en la aparición de cáncer de páncreas. Durante tres años se han estudiado los casos de 20 pacientes de Salamanca que unidos a muchos más casos de otros centros de España y de varios países de Europa pretenden determinar factores de riesgo que pueden influir en la aparición de la enfermedad, como podría ser el tabaco, al igual que ocurre en muchos otros tipos de cáncer. La idea es averiguar qué características de la vida y los hábitos de una persona pueden relacionarse con el tumor de páncreas.
Por el quirófano del Hospital Universitario de Salamanca pasan los enfermos de cáncer de páncreas de la región una vez que han ido seleccionados los casos que pueden ser operados. Además de esta labor asistencial, los especialistas se apoyan en los recursos del Centro de Investigación del Cáncer para avanzar en la investigación de esta patología.