Los tripulantes de la Estación Espacial Internacional pueden preparar sus ensaladas con lechugas rojas cultivadas en la propia estación. Un estudio confirma que estos vegetales son seguros y tan nutritivos como los de la Tierra, por lo que se podrían usar en las futuras misiones tripuladas por el sistema solar.
Los módulos que las grandes agencias espaciales tienen previsto levantar en la Luna podrían incorporar un elemento aportado por los propios colonizadores humanos: la urea de su pis. Investigadores europeos han comprobado que se podría utilizar como plastificante en el hormigón de las estructuras.
Investigadores de la Universidad Carlos III de Madrid y SENER Aeroespacial van a probar la eficacia de un nuevo propulsor de plasma helicón (HPT, por sus siglas en inglés). Se trata de una tecnología espacial de propulsión eléctrica que se podría utilizar en diversos tipos de satélites, para pequeñas plataformas en el espacio e incluso, en el futuro, para viajar a Marte.
El detector espacial LISA de ondas gravitacionales, el telescopio Athena para astrofísica de altas energías, la misión Hera para desviar asteroides, la estación espacial Gateway que orbitará la Luna, una iniciativa para traer muestras de Marte, nuevos satélites de la red 5G… En la próxima década la Agencia Espacial Europea participará en todos estos proyectos gracias al presupuesto de 14.400 millones de euros aprobado esta semana en Sevilla.
Ilustración de la estación Geteway orbitando la Luna con el módulo de servicio Orión acoplado (a la derecha). / ESA/NASA/ATG Medialab
Pronto comenzará el proceso de selección de una nueva promoción de astronautas europeos. / ESA/NASA
Foto oficial del consejo ministerial Space19+ de la ESA en Sevilla, en la que Pedro Duque, ministro de Ciencia, Innovación y Universidades en funciones, ha actuado de anfitrión. / ESA
Las astronautas Christina Koch y Jessica Meir de la NASA protagonizan este viernes el primer paseo espacial realizado únicamente por mujeres. Su objetivo es reemplazar un controlador de energía de baterías que se ha estropeado en el exterior de la Estación Espacial Internacional.
En Colonia (Alemania), doce voluntarios se sacrifican por la ciencia: pasan 60 días recostados en un estudio que simula las condiciones de microgravedad del espacio para contrarrestar la degeneración de huesos y músculos que sufren los astronautas. Su recompensa, además de 16.500 euros, es saber que están haciendo historia de la investigación aeroespacial.
En los años 60 entró a trabajar como ‘Luisito’ en las instalaciones de la NASA en España para seguir los vuelos tripulados del programa Apolo, y en los 90 se jubiló siendo Don Luis Ruiz de Gopegui, máximo responsable de las actividades de la agencia espacial en nuestro país. En el 50 aniversario de la llegada del primer ser humano a la Luna, Gopegui rememora cómo vivió aquella jornada histórica en la estación de Fresnedillas.