Hace veinte mil años, cuando los humanos eran cazadores nómadas y recolectores, las bajas concentraciones de dióxido de carbono en la atmósfera sumieron la Tierra en la Edad del Hielo. Los motivos por los cuales el nivel de CO2 fue tan bajo durante este período han sido difíciles de descifrar. Sin embargo, un estudio, en el que ha participado la Universidad Autónoma de Barcelona, ha demostrado la existencia de grandes depósitos de este gas en el fondo del Océano Austral durante este período en el que su nivel en la atmósfera fue muy bajo.
Geoarqueólogos del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana han realizado un estudio sobre la extensión, profundidad y dirección de los yacimientos de Gran Dolina y Complejo Galería gracias a la técnica de Tomografía de Resistividad Eléctrica. Los investigadores han descubierto no solo la entrada al Complejo Galería a escasos dos metros al oeste del yacimiento de Covacha de los Zarpazos, sino también que la Gran Dolina continúa hacia el interior de la Sierra de Atapuerca pero solo por su parte superior.
El estudio de las praderas marinas puede aportar gran información sobre el proceso de devastación de los ecosistemas costeros provocado por la acción humana en las últimas décadas, así se desprende de una investigación liderada por Universidad Autónoma de Barcelona. El trabajo aporta nuevas perspectivas para gestionar los cambios ambientales y climáticos.
Una joven sofoca el calor frente a un ventilador con nebulizador de agua durante la primera jornada del Abierto de Australia de tenis que se disputa en Melbourne (Australia), el 18 de enero de 2016 / David Crosling (EFE)
Si la semana pasada era la NASA quien lo anticipaba, hoy la Organización Meteorológica Mundial lo corrobora: la temperatura media global en superficie en el año 2015 batió todos los registros anteriores por un margen sorprendentemente amplio. Por primera vez se han medido temperaturas medias que superan en un 1 °C las de la era preindustrial.
Localización del epicentro del terremoto./ Efe
La combinación de tecnología láser aerotransportada e imágenes de drones ofrece novedosa información sobre el valle del Eria (León) para elaborar imágenes en 3D que revelan estructuras ocultas en el valle del Eria, en León. En esta zona estuvo ubicada una de las mayores minas de oro del Imperio Romano pero a día de hoy apenas se pueden distinguir estos yacimientos a simple vista debido a la cubierta vegetal. Sin embargo, una nueva metodologíaamplia las perspectivas tanto para los arqueólogos como para el desarrollo turístico de la zona.