Un equipo de investigadores del Instituto Max Planck de Cibernética Biológica de Tubinga ha desarrollado un minúsculo microscopio que se coloca en la cabeza de una rata y que permite estudiar la compleja actividad de las neuronas mientras el animal se mueve libremente. Este dispositivo permitirá a los científicos estudiar cómo el cerebro procesa la información que recibe de nuestros sentidos cuando estamos en movimiento; un proceso que hasta ahora era problemático porque no se podían registrar las señales del cerebro de un animal en movimiento. Sus resultados se publican en Proceedings of the National Academy of Sciences.