Descubierta por el astrónomo británico William Herschel en 1794, la nebulosa Iris o NGC 7023 se encuentra a 1400 años luz de la Tierra, en la constelación de Cefeo. Esa enorme distancia no ha impedido al telescopio espacial Hubble obtener una espectacular imagen en alta resolución de su región noroeste. La imagen, en la que se puede apreciar una gran cantidad de polvo cósmico, resulta especialmente útil a los astrónomos, porque les permite estudiar estas masas de pequeñas partículas y determinar así los ingredientes de la mezcla de la que acaban surgiendo las estrellas.