El fósforo y el potasio son dos minerales necesarios para una vida saludable; tanto, que muchos alimentos que compramos en los supermercados están enriquecidos con ellos. Sin embargo, no a todo el mundo le resultan beneficiosos estos aditivos, tal y como advierte un estudio que se publica en Clinical Journal of the American Society Nephrology. Así, muchos productos de carne cruda “enriquecidos” que pueden contener niveles muy altos de fósforo y potasio no advierten de esto en su etiquetado. Esto se convierte en un problema para los enfermos de riñón, que tienen que limitar su ingesta de estos minerales para no subir sus niveles de fosfato en sangre. “La carga impuesta a quienes buscan limitar el fósforo y el potasio de su dieta podría aligerarse si los productores realizasen un etiquetado más completo”, señalan los autores, de la Escuela Médica Robert Wood Johnson.