A la espera de los datos sobre el aumento del número de personas empadronadas en 2008 y de conocer la evolución de la crisis económica, la mayoría de los investigadores consultados por SINC apuntan que el aumento del paro, que ha crecido sobre todo entre la población inmigrante, hará descender el número de extranjeros que eligen España como destino. El Observatorio Permanente de la Inmigración (OPI) señala en su último informe que entre marzo y junio de 2008 bajó el número de extranjeros con tarjeta de residencia o certificado de registro, aunque apunta como posible causa los plazos administrativos.