Lo que parecía una fina, esférica y grumosa capa alrededor de la estrella R Sculptoris ha resultado ser una sorprendente estructura en espiral, probablemente originada por la presencia de otra estrella compañera oculta. El hallazgo ha sido posible gracias al Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA), un conjunto internacional de telescopios que se está construyendo en Chile y cuyas primeras unidades han permitido la observación. El trabajo, liderado por investigadores europeos, se publica esta semana en la revista Nature y abre la vía al estudio de la evolución estelar con un detalle sin precedentes. En concreto, el equipo ha analizado el ‘pulso térmico’ que originó la capa envolvente de la vieja estrella R Sculptoris, situada en la constelación de Sculptor, hace unos 1.800 años.