Científicos de la Universidad de Michigan (EE UU) han realizado las primeras observaciones sobre la superficie y la composición de la atmósfera de Mercurio, gracias a un sensor que mide las partículas cargadas de su campo magnético. Thomas Zurbuchen lidera el proyecto Fast Imaging Plasma Spectrometer (FIPS), un sensor del tamaño de una lata de refresco instalado en la nave MESSENGER gracias al que “ahora tenemos más información que nunca sobre la composición de Mercurio”. FIPS ha detectado silicio, sodio, sulfuro e incluso iones de agua alrededor de Mercurio. El estudio con los resultados se publica este viernes en Science.
