El colisionador de protones LHC ha tenido que retrasar su puesta en marcha por un cortocircuito intermitente en uno de los grandes imanes que forman parte de esta gran infraestructura científica. El reinicio, tras dos años de inactividad, tendrá una demora de “entre unos pocos días y unas semanas” según fuentes del Laboratorio Europeo de Física de Partículas (CERN).