Los incendios forestales que afectan a La Palma y Tenerife continúan activos y la tendencia es a que se estabilicen, tras una noche en la que se produjeron varios "sustos", así como un conato en el norte de la segunda isla y el desalojo de una persona en un caserío. En la isla de la Palma han ardido ya casi 900 hectáreas de terreno forestal.