Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid, en colaboración con distintos hospitales españoles, han desarrollado una nueva herramienta para el tratamiento de la alergia al melón. Se trata de un mutante del principal alérgeno de esta fruta que eliminaría los efectos secundarios de la inmunoterapia.
El Departamento de Bioquímica y Biología Molecular I de la Facultad de Ciencias Químicas de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) ha producido por técnicas de ingeniería genética un mutante del alérgeno principal del polen de olivo con reducida actividad alergénica, cuyo uso podría contribuir al desarrollo de una vacuna más segura frente a la alergia.
El Servicio de Alergología del Hospital Universitario Quirón de Madrid realiza un tratamiento innovador para lograr la tolerancia a leche y huevo en pacientes a partir de los cuatro años de edad que no han conseguido superar esa alergia de manera espontánea, como suele suceder en la mayoría de los casos. La técnica, conocida como Inducción Oral de Tolerancia a Alimentos (Specific Oral Tolerance Induction o SOTI), consigue que los niños empiecen a tolerar el alimento después de 9 a 12 semanas de terapia.
Investigadores de la UPM-INIA han identificado alérgenos de trigo que mejorarán el diagnóstico y el tratamiento del "asma del panadero", una de las enfermedades alérgicas ocupacionales más comunes.
Este antibiótico, de aplicación sobre todo en hospitales, es la segunda causa de reacción adversa a medicamentos por detrás de las penicilinas. El hallazgo ha sido resultado de más de ocho años de estudio y colaboración entre la Universidad de Málaga y el Hospital Carlos Haya.
Dicen que la primavera la sangre altera, y el sistema inmune, también. Picores, irritación, estornudos y dificultad para respirar trastornan el bienestar de quienes sufren los estragos del polen. Es solo uno de los agente externos ante los que nuestro ejército inmunitario muestra una reacción exagerada, y cada vez hay más afectados: en 20 años, la mitad de la población española será alérgica a alguna sustancia.
La enfermedad celíaca (CD) consiste en la intolerancia al gluten y, consecuentemente, en un mal crónico en el intestino delgado. Se trata de una enfermedad genética, cuyos indicios inmunológicos se pueden trazar en el cuerpo humano antes de que empiece a afectar a los quehaceres diarios de los futuros enfermos. Por ejemplo, las personas que tienen antecedentes genéticos de CD desarrollan anticuerpos contra el gen tTG (enzima denominada transgluminasa tisular) incluso antes de que la enfermedad se vuelva activa, a causa de una reacción celular contra el gluten.
Investigadores de la Sección de Alergia del Hospital Río Hortega de Valladolid llevan a cabo un proyecto que trata de profundizar en el origen de la alergia al cannabis, la droga ilegal más consumida en España y en el resto del mundo. Para ello colaboran con la Facultad de Farmacología de Vitoria que se encarga de una de las partes más complejas, “la realización de estudios de biología molecular para extraer el alérgeno causante de la alergia al cannabis”, explica Alicia Armentia, una de las especialistas que compone el equipo de investigación del Hospital vallisoletano.
Si hablamos de una persona que tiene un fallo en su sistema inmunológico y es atacado por sustancias que en principio no son nocivas para el ser humano, probablemente no caigamos en la cuenta de que nos referimos a los alérgicos que, como cada año, esta primavera vuelven a ponerse de moda.