Investigadores de GlaxoSmithKline en Tres Cantos (Madrid), en colaboración con universidades internacionales y el CSIC, han identificado una colección de 600 compuestos químicos con actividad frente a la leishmaniasis, el Chagas y la enfermedad del sueño. Los resultados se han publicado en abierto con el objetivo de dar acceso a la comunidad científica a compuestos con potencial terapéutico contra estas enfermedades tropicales desatendidas.
Un lote de la vacuna experimental contra el ébola, desarrollada por la farmacéutica GlaxoSmithKline y los Institutos Nacionales de Salud de EE UU, llegará hoy a Liberia. El envío de 300 viales de la vacuna candidata NIAID/GSK es el primero en llegar a uno de los países más afectados por la epidemia y se utilizará para iniciar un estudio clínico de eficacia a gran escala en las próximas semanas. El ensayo se hará con 30.000 voluntarios, incluidos miles de sanitarios que trabajan en primera línea.
La multinacional farmacéutica GlaxoSmithKline y los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos están desarrollando una vacuna contra el ébola que se ha probado por primera vez en humanos. Los 20 voluntarios sanos, que se han sometido a este tratamiento en EE UU, lo han tolerado bien y han mostrado respuesta inmunológica. A comienzos del año próximo, miles de trabajadores sanitarios podrían ser inoculados con esta nueva vacuna, según estas instituciones.
Investigadores de la filial española de GSK en Tres Cantos (Madrid) han demostrado la eficacia en ratones de unas nuevas moléculas contra la malaria. Estos compuestos, llamados pyrazoleamides, afectan a la capacidad de los parásitos para mantener los niveles adecuados de sodio dentro de sus células, lo que les lleva a una ingesta excesiva de agua que hace que estallen. El nuevo fármaco se podía administrar por vía oral, una vez al día.
El gigante farmacéutico británico GlaxoSmithKline puso en marcha hace cuatro años en sus instalaciones de Tres Cantos (Madrid) Open Lab, una iniciativa que promueve la colaboración entre investigadores de todo el mundo para avanzar en nuevos tratamientos de enfermedades de países en vías de desarrollo como la malaria. Gracias a este impulso, ya se han desarrollado dos compuestos prometedores contra esta patología que serán ensayados con humanos en fase 1 a finales de año.