Una investigación realizada por dos grupos de la Red de Investigación Cardiovascular (RECAVA) muestra que la metaloproteasa-10 (MMP-10) es un nexo clave entre la inflamación y la trombosis, particularmente en situaciones de mayor riesgo trombótico, como después de un infarto agudo de miocardio (IAM) y en la coagulación intravascular diseminada (CID).