No se sabe si fue macho o hembra, pero los paleóntólogos argentinos que han descubierto a esta nueva especie de dinosaurio hervíboro han decidido ponerle un nombre femenino: Ingentia prima. Esta colosal criatura medía entre entre 8 y 10 metros de longitud, pesaba unas 10 toneladas y vivió hace unos 205 millones de años, por lo que representa el caso más antiguo de gigantismo en dinosaurios.
El análisis de los restos de un yacimiento de Girona ha desvelado que sus antiguos habitantes utilizaban hongos como yesca para encender o transportar el fuego hace 7.300 años. El hallazgo supone una de las evidencias más antiguas del uso tecnológico de estos organismos. La investigación también ha permitido documentar seis especies de hongos y contabilizar un total de hasta 86 restos, algunos de ellos completos.
Los grupos neandertales tuvieron unas culturas complejas y dinámicas que fueron cambiando a lo largo del tiempo y el espacio. También contaron con unas estrategias de explotación del territorio ajustadas a sus intereses y preferencias. El análisis de restos de fauna de tres fases de ocupación del yacimiento de Jarama VI en Guadalajara confirma que desarrollaron sus propias prioridades, así como la tecnología de conservación de los alimentos, en función de los recursos y la disponibilidad de animales.
La datación de trece yacimientos del norte de España ha permitido precisar el tiempo que cohabitaron neandertales y Homo sapiens en esta región del suroeste de Europa. Según el estudio, liderado por el Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana, ambas especies coincidieron durante menos de un milenio, lo que pudo reducir sus posibilidades de interacción y reforzaría la hipótesis de una causa de extinción intrínseca.
En Porto Maior en As Neves (Pontevedra), se descubrieron numerosas piezas de gran tamaño de utensilios del Pleistoceno Medio muy bien conservadas. Un equipo de investigación, liderado por el Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana, ha datado dicho yacimiento por resonancia paramagnética electrónica y luminiscencia, y lo sitúa como el más antiguo con actividad humana de Galicia.
La mezcla y la integración de cazadores-recolectores locales y los primeros agricultores neolíticos llegados desde Oriente Próximo a la península ibérica fue más rápida de lo que se pensaba. Así lo revela un estudio internacional, que ha permitido analizar la compleja interacción de linajes de ADN antiguo de diferentes orígenes hace entre 5.500 y 4.500 años a.C., y cuya intensidad se mantuvo a lo largo del Neolítico.
El Madrid de hace 14 millones de años presentaba un paisaje muy diferente al de hoy. Una sabana casi desértica se extendía por el centro de la península en el Mioceno medio, con un clima tropical muy árido y hasta diez meses de sequía. Así lo revelan investigadores de la Universidad Complutense de Madrid que han comparado el tamaño de los restos de mamíferos hallados en el yacimiento paleontológico de Somosaguas con los que actualmente habitan África o Asia.
Los grupos de neandertales que hace sobre 60.000 años ocuparon el nivel Q del yacimiento de Abric Romaní (Capellades, Barcelona) dejaron importantes testimonios de sus actividades cotidianas. Así se demuestra con los trabajos de excavación que el Institut Català de Paleoecología Humana i Evolució Social ha desarrollado desde el pasado 8 de agosto.