Un equipo de investigadores, liderado por la Universidad de Sevilla, ha obtenido nanopartículas de plata metálica en un proceso químico donde el extracto de las semillas de anís estrellado se ha utilizado como reactivo. Es la primera vez que se desarrolla un método sencillo y de bajo coste que une el compuesto metálico con esta especia. El resultado son nanoestructuras que han demostrado ya sus propiedades para contrarrestar la actividad de hongos y bacterias causantes de infecciones.