No solo están infrarrepresentadas en los cargos de poder, sino que también reciben menos dinero. Las científicas que estudian el desarrollo de tumores reciben tan solo el 31% de las becas destinadas a este campo, según un estudio realizado con datos de organismos británicos. Las cifras son aún más desiguales si atendemos a la dotación económica, de la que ellos se llevan el 78%.