Un nuevo estudio en casi medio millón de personas de 10 países europeos pone el cerco al consumo de bebidas azucaradas o endulzadas artificialmente. Los resultados revelan que beber dos o más vasos al día de estos refrescos se relaciona con un mayor riesgo de muerte por todas las causas.
Un estudio publicado recientemente en la revista Diabetología revela que por cada 336 ml diarios de refresco azucarado, aproximadamente una lata, aumenta hasta un 22% el riesgo de padecer diabetes de tipo 2. Este porcentaje desciende ligeramente, hasta un 18%, si se tienen en cuenta el resto de calorías ingeridas y el índice de masa corporal.
Los adolescentes y universitarios no son conscientes de las consecuencias negativas derivadas del consumo de alcohol, ni siquiera de la posibilidad de desarrollar un proceso adictivo. Además, los más jóvenes empiezan cada vez antes el consumo, en mayor cantidad y con bebidas de más graduación, según un estudio liderado por la Universidad de Valencia.
Un equipo de científicos de la Universidad de Granada (UGR) analizará el efecto de una nueva bebida de naranja enriquecida en fibra y compuestos fenólicos seleccionados (principalmente flavonas), obtenidos por presión de la propia naranja sobre factores de riesgo de síndrome metabólico y enfermedad cardiovascular. Los investigadores buscan 150 personas de entre 18 y 65 años, hombres y mujeres, con problemas de sobrepeso.