Investigadores del Instituto de Oncología Vall d'Hebron responsables del proyecto.
La presencia en sangre de niveles relativamente altos de bilirrubina, dentro de unos cauces normales, podría asociarse con un riesgo inferior de sufrir cáncer de pulmón. Así lo señala una investigación realizada a pacientes de Reino Unido que revela la posibilidad de que esta sustancia sanguínea tenga efectos antioxidantes y antiinflamatorios.
Las provincias pioneras en políticas de prevención precoz del cáncer de mama, como Navarra y País Vasco, son las que registran menores índices de mortalidad, aunque la tendencia es a igualarse en toda España. Así lo señala un estudio, realizado por investigadores españoles, que analiza por provincias el número de mujeres fallecidas entre 1975 y 2005.
La prevención precoz resulta fundamental contra el cáncer
Una terapia sin efectos secundarios. Este importante avance, publicado en la prestigiosa revista Nature Chemistry, se basa en la encapsulación de un catalizador (paladio) dentro de microesferas para sintetizar materiales artificiales o activar fármacos dentro de células humanas y evitar así su toxicidad.
Un equipo internacional de científicos ha secuenciado la información genética de siete variedades de cáncer de próstata y ha descubierto nuevos mecanismos relacionados con la enfermedad. Con estos datos, los investigadores esperan desarrollar herramientas de diagnóstico personalizadas para cada paciente.
Gracias a modelos matemáticos, una nueva investigación predice por primera vez las cifras de muertes por cáncer en todo el continente: este año fallecerán casi 1,3 millones de personas, lo que supone un aumento con respecto a las muertes ocurridas en 2007 (1.256.000, los últimos datos disponibles). Conocer estas cifras puede ayudar a planificar mejor contra la enfermedad.
Los tumores hematológicos, como leucemias, mielomas y linfomas, que suponen un 10% del total de cánceres, podrían tener a partir del 2016 un tratamiento adicional a la quimioterapia. Este tratamiento estaría basado en la inyección al paciente de células denominadas células “asesinas” o células NK, del inglés “natural killer”, que ocasionarían el rechazo del tumor.
Son muchas las personas que consiguen superar un cáncer. Bastantes menos las que lo tratan como una enfermedad más. Estigmatizar esta afección oncológica, que en España afecta a 1.500.000 de personas, se ha convertido en un problema que sólo consigue que pacientes y familiares vivan aislados y discriminados por la sociedad.