La subespecie de la cabra montés ibérica Capra pyrenaica pyrenaica se extinguió en 2000, antes de que se pudieran analizar en profundidad sus características biológicas y filogenéticas. Ahora un nuevo estudio arroja luz sobre su tamaño, origen y condiciones ambientales posglaciales al describir tres cráneos fósiles de entre 4.000 y 7.000 años de antigüedad hallados en el suroeste de los Pirineos.