Si bien la depresión y la ansiedad se reconocen desde hace mucho tiempo como factores de riesgo para las dolencias cardíacas, existe menos certidumbre acerca de los efectos beneficiosos de un estado psicológico 'positivo'. Ahora, tras un estudio realizado sobre 8000 funcionarios británicos, los investigadores afirman rotundamente que una vida satisfactoria protege el corazón.