Investigadores de las universidades Politécnica y Complutense de Madrid han creado diversas aplicaciones para facilitar la conducción autónoma, permitiendo la comunicación entre los vehículos, la infraestructura asociada y los centros de control del tráfico. También han desarrollo sistemas para supervisar el estado del conductor en las transiciones automático-manual.
Científicos de la Universidad Autónoma de Barcelona y el laboratorio Intel Computing Visual han creado un entorno virtual, denominado CARLA, para probar la conducción autónoma y que el coche pueda 'aprender' cómo tiene que reaccionar en diferentes entornos urbanos, condiciones meteorológicas y de luz, así como frente a distintos imprevistos. El programa es de código abierto y se puede usar de forma gratuita.